Acerca de Adolfo Bioy Casares, su obra y el cuento "En memoria de Paulina"



(Montevideo) Magda Lago Russo

Adolfo Bioy Casares (Buenos Aires,15 de septiembre de 1914 – Buenos Aires8 de marzo de 1999) fue un escritor argentino que frecuentó la literatura fantástica, policial  y de ciencia ficción. Es considerado uno de los escritores más importantes de la literatura en español, habiendo recibido el Premio Internacional Alfonso Reyes y el Premio Miguel de Cervantes, ambos en 1990. Fue uno de los primeros narradores contemporáneos. Su obra se distingue por ser a la vez imaginativa y fría, y tal vez hasta pudorosa. Así es como se descubre alguna broma o escena grotesca intercalada entre párrafos sentimentales con la sola intención de reducir la emoción romántica. Hay tres aspectos constantes en su obra: fantasía, amor, ironía. No es un autor al que se pueda leer precipitadamente: sólo una lenta lectura permite saborear los minúsculos detalles y las continuas sutilezas de su estilo. A los once años escribió su primera novela, Iris y Margarita, para una prima de la que estaba perdidamente enamorado. A los catorce, Vanidad o Una aventura terrorífica, cuento fantástico y policial. En 1932 conoció, en la casa de Victoria Ocampo, a quien fue su amigo y colaborador: Jorge Luis Borges. Mantuvo con Borges una fecunda amistad, de la cual nacieron obras literarias tales como: Seis problemas para don Isidro Parodi, Libro del Cielo y del Infierno, Crónicas de Bustos Domecq. H.Bustos Domecq es el famoso seudónimo con el cual solían firmar cuando formaba el dúo creativo con Borges.  Un modelo para la muerte, lo firman con el seudónimo de B. Suárez Lynch. Para Borges y Bioy Casares el papel más importante de sus obras lo desempeña la fantasía. La soledad también es contemplada pero su papel es menos preponderante. Sin embargo lo que los une es: la obsesión metafísica. En 1934 Bioy Casares conoció a Silvina Ocampo, con quien se casó en 1940. El ese mismo año publicó La invención de Morel que marca el verdadero inicio de su carrera literaria y  será su obra más famosa convirtiéndose en un clásico de la literatura contemporánea. En colaboración con su esposa, Silvina Ocampo  escribió una novela policíaca: Los que aman odian. En 1954 nació su única hija Marta, y publicó El sueño de los héroes, donde mezcla sueños, realidad y fatalidad. (Un hombre sueña, quiere averiguar si lo soñado es verdad, lo busca en la realidad y lo encuentra: muere acuchillado). En 1969 apareció Diario de la guerra del cerdo, llevada posteriormente al cine por Leopoldo Torre Nilson. En La trama celeste (1948) - también conocida como En memoria de Paulina utilizó recursos tales como: la telepatía, los trucos de la memoria, la doble identidad, los mundos simultáneos y las máquinas prodigiosas. Bioy Casares es dueño de una vasta obra en donde la fantasía y la realidad se superponen con una armonía magistral. La impecable construcción de sus relatos es, quizá, la característica que con mayor frecuencia ha destacado la crítica con respecto a su obra. Considerado uno de los más destacados autores de la literatura universal y de los más notables que ha dado el continente americano, Bioy Casares fue el pionero de la literatura fantástica en Argentina, pero también un cronista de la realidad y autor de novelas de amor. En memoria de Paulina es un cuento del autor que se encuentra en la colección La trama celeste. Es un relato casi de tipo policial, donde el narrador lleva al lector por un camino tortuoso de indicios, averiguaciones, informaciones -y fundamentalmente- a lo largo de obsesivas y rigurosas reflexiones intelectuales, hasta descubrir el motivo desencadenante de toda su desgracia. La situación inicial establece que el protagonista está seguro de que su destino es casarse con Paulina. La introducción se extiende en consideraciones acerca de lo inevitable que era la consumación de su matrimonio: “La vida fue una dulce costumbre que nos llevó a esperar, como natural y cierto, nuestro futuro matrimonio”. El conflicto se inicia cuando Paulina le anuncia su casamiento con Montero. El protagonista narra el momento, su sorpresa y su pena: "Oí de pronto: - Esa primera tarde ya estábamos perdidamente enamorados.” Y continúa: “Me pregunté quiénes estaban enamorados". Luego describe su incredulidad y su dolor: “No sabía si Paulina hablaba en broma o en serio." “No sabía lo desgarradora que era mi congoja.” Cuando el protagonista advierte la verdad y confirma que Paulina nunca lo amó. Admite: “Quisiera descubrir ahora que me equivoco de nuevo.” “Es la convicción de que Paulina no volvió porque estuviera desengañada de su amor. Es la convicción de que nunca fui su amor.” Finalmente: A lo largo del relato el protagonista opone su fantasía -su creación casi literaria, el poderío de su argumento- a la realidad, cuya argumentación está provista por la verdad. Pero él vive esta fantasía como realidad, de manera que le resulta muy difícil distinguir entre una y otra si no fuera gracias a su capacidad y a su honestidad intelectual, que lo llevan a depurar tanto su argumento, que finalmente no puede hacer otra cosa que aceptar la verdad, por dolorosa que ésta sea.  Se observa en este análisis que el protagonista cree haber encontrado la verdad, pero vive dentro de una fantasía, dentro de una ficción que él, como literato e intelectual supo crear y que acepta como real. Confunde realidad y fantasía al punto de encontrar la verdad y el amor en su ficción, mas con la aparición de Montero, se ponen en evidencia las fallas del argumento, forzándolo finalmente a aceptar la verdadera historia La verdad triunfa frente a la construcción fantasiosa porque la necesidad intelectual del protagonista de que no aparecieran problemas argumentales, anacronismos o incoherencias lo lleva a seguir jugando con las diferentes posibilidades y finalmente tiene que elegir entre un argumento mediocre que alivia su dolor y su soledad o aceptar la fuerza argumental de la verdad que aclara los hechos y confirman que Paulina nunca lo amó. La historia está escrita en primera persona. El protagonista está enamorado de Paulina pero, desgraciadamente para él, ella lo abandona y se casa con un amigo mutuo, Julio Montero. Ella visita al narrador y se ausenta pronto. Montero la estaba esperando, en las afueras de la casa, durante una noche lluviosa. El protagonista parte a un país extranjero a estudiar y vuelve después de unos pocos años.

Paulina vuelve y lo visita y lo abraza en una noche lluviosa. Ella sale, asustada, y se encuentra con Montero, como en la primera vez. El escritor nota que él vivió la ilusión de Montero; se da cuenta que ella está muerta, en realidad. Montero la asesinó esa misma noche por celos hacia el protagonista. Esta historia cuenta con un fuerte carácter de realismo mágico y esto se nota en la conclusión donde se muestra que la aparición de Paulina al narrador tan solo es el resultado del deseo de este por verla y el temor de Julio Montero por la traición de Paulina, en este punto el temor y el deseo hicieron realidad esta fantasía donde el narrador pudo apreciar de nuevo y por última vez a Paulina.

Este cuento, propone un análisis del uso de la perspectiva y del espacio poético. Estas técnicas, virtuosamente manejadas por el autor, pueden considerarse en relación con otros problemas cognitivos: la debilidad del ser humano y sus limitaciones de conocimiento. Asimismo, Bioy trata un tema recurrente en él: la imposibilidad del amor.  En este cuento fantástico: todos los personajes, incluso el narrador, y todas las situaciones son fruto de la imaginación de Montero, el asesino de Paulina. Bioy realiza así una interesante inversión de las fronteras entre lo real y lo irreal. En memoria de Paulina es uno de los cuentos que compone La trama celeste (1948) -los más elaborados de toda su obra- Bioy Casares experimenta por primera vez una creciente incomodidad ante ese modo del relato fantástico centrado en la construcción de «invenciones rigurosas, verosímiles, a fuerza de sintaxis», que dominó su perspectiva sobre el género durante los años cuarenta. La sospecha de estar componiendo, conforme a un oficio mecánicamente aprendido, cuentos de tramas cada vez más complejas e intrincadas, se continúa durante la escritura de los relatos de Historia prodigiosa y motiva, poco tiempo después, una ruptura relativa y circunstancial con las convenciones del género defendidas hasta ese momento, Guirnaldas con amores (1959), un libro misceláneo en el que alternan fragmentos y aforismos de índole variada con cuentos breves y de arquitectura menos rígida, concreta ese alejamiento momentáneo de un modo ostensible. El componente fantástico, dominante en sus historias anteriores, es desplazado de estos relatos por la otra gran constante temática que su literatura viene desarrollando desde la década anterior, la sentimental.
 
FUENTES

Concepción del cuento de Bioy Casares – Beatriz Curia

Perspectivas y espacios en un cuento de Bioy Casares – Javier de Navascués – Univ. De Navarra

35 cuentos breves argentinos – Fernando Sorrentino.

8/ edición. Bs. As.

                                                               

(c) Magda Lago Russo

Montevideo

Uruguay

 

Magda Lago Russo es escritora



 




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